Existen diferentes tipos de caras debido a una combinación de factores genéticos y características étnicas. La forma del rostro está determinada principalmente por la estructura ósea y la distribución de los tejidos faciales, como los músculos y la grasa subcutánea.
El patrón genético de una persona influye en la forma de su cara, y este patrón puede heredarse de los padres y antepasados. Además, diferentes grupos étnicos tienen características faciales distintivas debido a la adaptación al entorno y a la evolución a lo largo del tiempo.
Factores como el tamaño y la forma de los huesos del cráneo, la mandíbula, la frente y las mejillas, así como la densidad y distribución de los tejidos blandos, contribuyen a las diferencias en la forma y estructura del rostro.
Además, los músculos faciales y las expresiones faciales repetidas a lo largo del tiempo pueden influir en la formación de pliegues y arrugas características de cada tipo de cara.
En resumen, los diferentes tipos de caras son el resultado de una combinación compleja de factores genéticos, étnicos y ambientales que dan lugar a una amplia diversidad de formas y características faciales en la población humana.

Dependiendo de tu tipo de cara debes seleccionar el tipo de maquillaje
Para realizar un maquillaje adecuado, es importante tener en cuenta el tipo de cara para resaltar sus características y lograr un equilibrio armonioso.
A continuación, describiré los tipos de cara más comunes y algunas recomendaciones de maquillaje para cada caso:
Cara ovalada: Esta forma de cara se considera la más equilibrada y versátil. Las proporciones son armoniosas, con la frente ligeramente más ancha que la mandíbula. En este caso, se pueden utilizar diferentes estilos de maquillaje, pero es importante destacar los pómulos y la forma natural de la cara.
Cara redonda: Se caracteriza por tener una longitud y anchura similares, con mejillas redondeadas. El objetivo es alargar visualmente la cara y crear ángulos. Se puede lograr utilizando contorno en las mejillas y sienes, así como también enfocando la atención en los ojos y labios con tonos más oscuros.
Cara cuadrada: Se caracteriza por tener una mandíbula ancha y una frente amplia. Para suavizar las líneas angulares, se puede utilizar un contorno sutil en las mandíbulas y los extremos de la frente. También es recomendable utilizar colores suaves en los ojos y labios para crear un equilibrio.
Cara alargada: Este tipo de cara tiene una longitud mayor que el ancho. El objetivo es acortar visualmente la cara y crear la ilusión de una cara más equilibrada. Se puede lograr utilizando rubor en las mejillas hacia el centro de la cara y evitando tonos oscuros en los labios y los ojos.
Cara en forma de corazón: Se caracteriza por una frente más ancha y una barbilla puntiaguda. Para equilibrar las proporciones, se puede aplicar contorno en los lados de la frente y la barbilla, y destacar los ojos y labios con tonos suaves y naturales.
Estas son solo algunas pautas generales para tener en cuenta al maquillar diferentes tipos de cara. Sin embargo, cada persona es única y puede tener características individuales que requieran enfoques personalizados. Experimenta con diferentes técnicas y estilos de maquillaje para encontrar lo que te haga sentir más hermosa y segura.